Con los nervios de punta, vaciando tarros de agua y con fregonas en mano,... retirando cosas de sitios, y sin poder hacer nada más, sólo limpiando el anegado suelo del salón de entrada, las escaleras y las salas de priostía y superior, esperando a que escampe. Esta es la imágen mental que se tiene que hacer el hermano para comprender la actualidad que se ha venido viviendo en esta Hermandad, en los últimos días. El temporal de lluvia que nos está azotando está teniendo graves consecuencias en nuestra Casa de Hermandad. La fuerte racha de lluvias, las últimas obras de la Biblioteca, su repaso en verano cuando aún no se sabe si todo ha podido quedar subsanado, el alto muro vecino que retiene el golpe de agua para drenar en el tejado de nuestra sede social, y sobre todo la lluvia intensa,... y más lluvia todavía..., con el viento en todas las direcciones, ha provocado importantes goteras que han calado de forma importante en el techo de la zona lateral derecha del edificio, cuyos recillones y tejas se colocaron hace unos 18 años, tras subir estos muros que ahora nos acogen y que hasta ahora nunca habían causado problemas. Como popularmente se dice, aquello parecía "una canasta rota" durante los momentos de lluvía con aquel "pin pin" que caía en los cubos y en el propio suelo, pues el goteo continuo y disperso fuera de los recipientes (no teníamos más) lo inundaban y encharcaba todo aquel sector derecho... Entre las repercusiones: el Belén empapado con su albero salpicado en el mármol, el Santo Varón José chorreando de agua, la parihuela de palio desplazada de su ubicación normal, paredes "apulgaradas " de mohos, el baúl de priostía retirado de su pared, los cuadros recogidos en un rincón, las tomas de electricidad saltando... De ahí que ahora no tengamos más remedio que actuar por emergencia ante esta circunstancia, al presentársenos esta necesidad perentoria (y menos mal que no está todavía el nuevo paso de Cristo en la Casa Hermandad o por no ser fecha aún no se ha tenido que tener montado el palio...). ¡Estas son las cosas que le pasan a tu Hermandad del Santo Entierro: en pocos días tenemos que colocar en la web titulares tan distintos como de "Ardiendo" a "Anegado"! ¡Cuestión de Elementos!...
28 de diciembre de 2010
ANEGADO
Con los nervios de punta, vaciando tarros de agua y con fregonas en mano,... retirando cosas de sitios, y sin poder hacer nada más, sólo limpiando el anegado suelo del salón de entrada, las escaleras y las salas de priostía y superior, esperando a que escampe. Esta es la imágen mental que se tiene que hacer el hermano para comprender la actualidad que se ha venido viviendo en esta Hermandad, en los últimos días. El temporal de lluvia que nos está azotando está teniendo graves consecuencias en nuestra Casa de Hermandad. La fuerte racha de lluvias, las últimas obras de la Biblioteca, su repaso en verano cuando aún no se sabe si todo ha podido quedar subsanado, el alto muro vecino que retiene el golpe de agua para drenar en el tejado de nuestra sede social, y sobre todo la lluvia intensa,... y más lluvia todavía..., con el viento en todas las direcciones, ha provocado importantes goteras que han calado de forma importante en el techo de la zona lateral derecha del edificio, cuyos recillones y tejas se colocaron hace unos 18 años, tras subir estos muros que ahora nos acogen y que hasta ahora nunca habían causado problemas. Como popularmente se dice, aquello parecía "una canasta rota" durante los momentos de lluvía con aquel "pin pin" que caía en los cubos y en el propio suelo, pues el goteo continuo y disperso fuera de los recipientes (no teníamos más) lo inundaban y encharcaba todo aquel sector derecho... Entre las repercusiones: el Belén empapado con su albero salpicado en el mármol, el Santo Varón José chorreando de agua, la parihuela de palio desplazada de su ubicación normal, paredes "apulgaradas " de mohos, el baúl de priostía retirado de su pared, los cuadros recogidos en un rincón, las tomas de electricidad saltando... De ahí que ahora no tengamos más remedio que actuar por emergencia ante esta circunstancia, al presentársenos esta necesidad perentoria (y menos mal que no está todavía el nuevo paso de Cristo en la Casa Hermandad o por no ser fecha aún no se ha tenido que tener montado el palio...). ¡Estas son las cosas que le pasan a tu Hermandad del Santo Entierro: en pocos días tenemos que colocar en la web titulares tan distintos como de "Ardiendo" a "Anegado"! ¡Cuestión de Elementos!...